miércoles, 20 de junio de 2012

¿Quién dijo que la sencillez no podía ser bonita?

Mi tercera tarta, algo improvisada y bastante sencilla pero quedó bonita porque la verdad es que estas tartas no necesitan tener millones de adornos para llamar la atención.
Primero la vemos como un sombrerito, queda bastante simple pero ya con ese lacito que le ponemos alrededor dice algo más!


Y no hay nada que no se arregle con unas bonitas flores, las cuales estaban duras, durísimas, pero aún así se dejaron comer.
No las hice yo, la verdad es que aún no sé hacerlas. Sé que venden unas tijeras para recortar pétalos y poder hacerlas pero la verdad es que primero necesitaría saber cómo, así que tendré que investigar o si hay alguien que quiera ponerme cómo se hacen, encantada J


Y por último unas letras de adorno. Me compré unos moldes que eran bastante malos porque las letras son demasiado pequeñas y luego o se rompen o cuesta sacarlas del molde así que terminé por comprarme unas un poco más grandes que son mucho más cómodas, aunque en tartas más pequeñas es verdad que meter un felicidades en grande quizá sea más complicado, pero ahí entra la imaginación de cada uno.
Y por si alguien está pensando en comprarse algunas, en mi opinión las medianas (que no tienen porque ser enormes) son más fáciles de manejar y más útiles.
  

Es la perfecta tarta para los que quieren empezar en este mundillo! 

2 comentarios:

  1. Me encantan, cómo podría conseguir una?cuanto cuestan?

    ResponderEliminar
  2. Dependiendo de cómo la quiera en cuanto a tamaños y a la decoración, para darme los datos en caso de que quisiera alguna puede escribirme a mi dirección de correo y la mantendré informada en todo momento (paulahinojal@gmail.com) :)

    ResponderEliminar